El 2 y 3 de diciembre se desarrolló la “Giornate CUIA in Italia 2020 (in streaming)”. El programa incluyó una primera jornada institucional, para presentar las principales actividades realizadas este año, de acuerdo con los distintos socios institucionales del Consorcio. El segundo día, en cambio, estuvo dedicado a la investigación que se está impulsando tanto en las universidades y centros de investigación argentinos, como en las Universidades de CUIA, sobre el COVID-19 e incluyó varias sesiones temáticas con aportes de diferentes campos disciplinares.

CUIA

CUIA nació en 2002 como un proyecto de internacionalización del sistema universitario italiano, gracias a la financiación del Ministerio de Educación, Universidad e Investigación (MIUR), inicialmente entre 14 universidades públicas italianas. Bajo la coordinación de la Universidad de Camerino, en 2004 el proyecto se convierte en un "consorcio" que tiene como objetivo fomentar las relaciones interuniversitarias entre Italia y Argentina. Hoy el Consorcio cuenta con 27 universidades miembro.

CUIA está operativo en Italia y Argentina y apoya activamente proyectos de investigación conjuntos, así como la movilidad de estudiantes, profesores e investigadores, y en particular, de estudiantes de doctorado. Esta última actividad, la promoción y apoyo a la movilidad de estudiantes de doctorado italianos y argentinos, fue de hecho reconocida en el Protocolo Ejecutivo entre el gobierno italiano y el gobierno argentino para la colaboración cultural y educativa para los años 2014-2018.

Representante de FHUC

El jueves 3 de diciembre Javier Gómez, docente del Departamento de Geografía de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la UNL e investigador del CONICET, participó del panel sobre el Ámbito Político-Económico del COVID 19. Su exposición se tituló “Propuesta de un geoportal sobre la pandemia del COVID-19 en Santa Fe (Argentina): beneficios, desafíos y líneas de comparación”.

Compartió el panel con Gianpiero Dalla Zuanna (Università di Padova), quien brindó la charla “L’approccio italiano ed europeo contro il COVID-19: punti di forza e di debolezza”, y Lourdes Lucero (Universidad del Salvador), quien se refirió a "La economía global después del COVID-19".

En su trabajo Gómez aborda la experiencia en el desarrollo de un geoportal sobre el COVID-19 en la provincia de Santa Fe. La irrupción y devenir de la pandemia del denominado Coronavirus SARS COV-2 en el año 2020, desafió a un grupo de investigadores de la Universidad Nacional del Litoral (Argentina) a proponer el diseño de un geoportal que pudiera sistematizar información georreferenciada relacionada al COVID-19 en la Provincia de Santa Fe para monitorear el estado de situación del evento sanitario mencionado y así dotar de un mayor potencial a la información y brindar ayuda a las autoridades para optimizar el aprovechamiento de los recursos sanitarios en los diversos puntos del territorio santafesino.

En segunda instancia, el propósito es explorar determinados patrones de tipo territoriales en lo que refiere a la evolución y al comportamiento del virus, para lo cual se propone un tratamiento de la información a diversas escalas y con distintos recortes temporales.

En cuanto al método aplicado, se diseñó una matriz de datos que se utiliza como insumo para la actualización semanal del Geoportal COVID-19. La misma contiene información sobre ocurrencia de casos de contagio producidos en cada uno de los 19 departamentos y en los 362 gobiernos locales del territorio provincial. Se calculan además, para dichos recortes jurisdiccionales, las tasas de incidencia y de letalidad. Las fuentes de información utilizadas son el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2010, una estimación poblacional al año 2020 realizada por el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos –IPEC- y los Partes Diarios de casos confirmados y fallecimientos emitido por el Ministerio de Salud de la provincia de Santa Fe. Los resultados obtenidos hasta el momento y presentados específicamente en este trabajo permiten dimensionar el comportamiento cuantitativo y territorial de la pandemia durante ocho meses –marzo a noviembre de 2020-, a la vez que favorece la comprensión de su evolución en relación con la incidencia diferencial que producen las brechas territoriales y demográficas –tales como las edades y el género-.